Todo lo que debes saber si estás pensando en realizar un máster

Cuando el estudiante termina el Grado universitario, existe la posibilidad de profundizar en su área profesional a través de un Máster. Generalmente, con el posible inicio de una nueva titulación, son muchas las cuestiones que se plantean. Es por eso que a lo largo de este post se expondrán las dudas más frecuentes y se resolverán los aspectos básicos que debes conocer si quieres realizar estos programas. 

Aunque las universidades ponen a disposición del alumno información vinculada a los programas que ofrece, en muchas ocasiones el universitario no sabe cómo encontrarla o qué significan algunos de los términos que se exponen. Entre las dudas más frecuentes, se encuentran: ¿son todos los estudios de máster iguales?, ¿cuáles son las características de uno oficial? ¿y del propio?

Son cuestiones comunes que se repiten con frecuencia cuando se quiere iniciar estudios universitarios de máster. Por ello, responderemos a estas preguntas al mismo tiempo que definimos los rasgos fundamentales de cada una de ellas a tener en cuenta. 

¿Qué es un postgrado?

Lo primero que tenemos que saber es que los estudios que se hacen una vez terminado el Grado o la Licenciatura se llaman de postgrado. No obstante, aunque se realizan después de haber concluido una carrera universitaria, la titulación obtenida es diferente a la del máster. 

Entre sus diferencias, encontramos la duración horaria. En los estudios de máster el período en el que el alumno recibe clases y realiza los proyectos pertinentes se prolonga hasta un año académico, aproximadamente. Por otro lado, los programas de postgrado suelen ser más cortos. 

Además de la mencionada, otra diferencia entre ambos programas son los requisitos de acceso. Para acceder al máster, tendrás que estar en posesión, necesariamente, de un título de Grado o Licenciatura. No obstante, para realizar el postgrado, puedes acreditar tu experiencia profesional en el ámbito del programa y podrás matricularte sin necesidad de tener una carrera universitaria.

Otra de las diferencias que suele ser decisiva para la selección de un programa u otro es la titularidad. Es decir, si se trata de un máster oficial o propio. 

¿Cuál es la diferencia entre un máster oficial y uno propio?

Probablemente, hayas podido ver diferentes estudios que la universidad calificaba como “propios” u “oficiales”. Se trata de una distinción vinculada a la homologación del título universitario y la posibilidad de acceder a otros superiores, de doctorado. 

En el caso del máster, se podrá diferenciar entre propio u oficial. Esto quiere decir que una vez finalizados los estudios de la titulación pertinente, podrás acceder al doctorado. Además, el programa que hayas realizado también estará acreditado por la ANECA e inscriptos en el Registro de Universidades, Centros y Títulos. 

En cuanto a los propios, su plan de estudios estará elaborado por los centros y habrá sido verificado por el Consejo de Universidades y autorizados para la Comunidad Autónoma. Por lo tanto, no tendrán ningún tipo de homologación en otros países ni te permitirán acceder a programas superiores de doctorado. 

Los títulos de postgrado, por su parte, son todos propios. Por lo tanto, de la misma forma que sucede con los estudios de máster de estas características, no cuentan con la homologación europea ni permiten acceder a  titulaciones superiores. 

¿Qué tipos de máster existen?

Existen diferentes programas de máster. En este caso, se dividen como consecuencia del lugar en el que se imparte o su finalidad. Se pueden diferenciar un total de 3:

Máster Habilitante

Este tipo de máster es el que te permite ejercer a largo plazo. Un ejemplo de esto es el MIR, que deben de estudiar los profesionales de medicina para obtener su certificación habilitante. 

Máster Erasmus Mundus

Este tipo de titulación se caracteriza por estar impartida en dos universidades distintas dentro del EEES. Por lo tanto, deberás realizar tus estudios en al menos dos países que tenga el máster que estés realizando. Al finalizarlos, se te concederá un título de manera conjunta.

Máster interuniversitario

En este caso, se trata de un tipo de máster que es impartido por más de una universidad. Es decir, que se suele impartir por dos universidades con un mismo plan de estudio. Generalmente, implica la movilidad del alumno en tanto que debe realizar las asignaturas en diferentes centros.

Entonces, ¿qué características tiene un Master?

Aunque son varias las características y factores a considerar cuando se van a empezar unos estudios de máster, el principal aspecto que debes tener en cuenta es si se trata de uno oficial o propio. Una vez hayas definido este rasgo, podrás decidir qué tipo de programa quieres realizar (interuniversitario, habilitante, etc). 

También tendrás que tener en cuenta la duración del máster. Como se ha comentado con anterioridad, generalmente estos suelen ser de un año. No obstante, existen titulaciones en las que el tiempo dedicado aumenta, y puede llegar a prolongarse durante dos cursos académicos. Para que conozcas cuánto tiempo tendrás que cursarlo y la complejidad de las asignaturas que lo componen, te recomendamos que consultes la guía docente para conocer el número de créditos ECTS que lo forman.

En cuanto al método de evaluación, en cada máster variará y tendrás una parte teórica, práctica o ambas. La escala numérica con la que se te calificará será la misma que en el Grado: suspenso de 0 a 4.9, aprobado de 5 a 6.9, notable de 7 a 8.9 y sobresaliente 9 a 10.

¿Cómo elegir un máster después del grado?

Si esta es la pregunta que te quita el sueño, debes saber que no existe una sola respuesta. A pesar de que tanto los títulos oficiales como los propios tienen sus ventajas, es una decisión que tendrá mucho que ver con el área en el que quieras desarrollarte y ejercer a largo plazo.  

Te sugerimos que leas con detenimiento los programas de los títulos propios de las universidades, ya que muchas de ellas cuentan con mucho prestigio internacional. De hecho, este factor es el que las ha impulsado y les ha permitido establecer su propio plan de estudios según el análisis de mercado llevado hasta el momento. 

Además, los títulos propios, muchas veces, cuentan con una carga horaria en prácticas mucho más elevada que los oficiales ya que son las propias universidades o fundaciones las que se ponen en contacto con entidades públicas y/o privadas para poder formar a sus profesionales.

Por lo tanto, nuestra recomendación es que no te dejes guiar únicamente por las ventajas o desventajas que, a priori, puede tener uno u otro programa. Haz un ejercicio de autoconocimiento para saber qué quieres hacer, y una vez realizado, investiga las posibles alternativas a elegir.

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